Angel Cortés - Eran datos con trampa. Aznar comparaba
el uso de Internet en España en 1995, cuando apenas existian cinco proveedores
de internet y la tecnología de acceso estaba poco extendia y era muy costosa,
con el año 2003. Igualmente sucedia con la telefonía móvil, con terminales que
rondaban como minimo las 100.000 pesetas en ese año y una tecnología, la GSM,
que aún estaba en pañales.
España y el conjunto de sus ciudadanos ha vivido durante estos últimos años una
importante tecnificación, es cierto y nadie puede negarlo. Internet y los
modernos sistemas de comunicación son herramientas ampliamente utilizadas y
conocidas por los ciudadanos, aunque cabe preguntase si este fenomeno ha sido
fruto de una politica decidida por parte del Gobierno o por el contrario del
empeño de los propios ciudadanos en estar en la onda a pesar de todas las
dificultades.
Si observamos la politica desarrollada en este terreno por parte del Ministerio
correspondiente en los últimos años poco podemos decir a su favor. Los reclamos
de unos accesos más economicos en banda ancha han sido constantemente toreados
por el Ministro de turno, mientras se ha favorecido que las operadoras
alternativas no invirtieran en redes propias y se dedicaran a revender la
capacidad de Telefónica. Por no hablar del tan polémico proxy-cache defendido
desde el Ministerio o los contratos con penalización que aplican los proveedores
de acceso y que impiden el cambio de proveedor, aunque se encuentre una oferta
más economica que la contratada. Otras quejas que han estado presentes en los
últimos años han sido la dificil llegada a los consumidores de mejores precios
en los servicios basicos bajo el pretexto de defender la existencia de los
operadores alternativos y la actitud condescendiente de los estamentos hacía las
operadoras móviles, su politica de precios y el coste de sus servicios.
Si hubiesemos de valorar la actuación del gobierno Aznar en estos últimos años,
lamentablemente deberiamos decir que ha estado más preocupada en defender los
derechos de los grandes grupos que en promocionar la introducción de la
tecnología en todos los estamentos de la sociedad, así como en la creación de un
tejido empresarial que ofreciese y prestase sus servicios a través de interent.
La LSSI es un ataque directo a las PYMES y a la naciente industria online que
vivió España en pleno boom internet; El plan INFO XXI apenas sirvió para mejorar
la administración sin que el ciudadano no viera más aspectos positivos en su
vida que la posibilidad de realizar algunos tramites administrivos y
particularmente el pago de impuestos y tasas a través de la red; y por último la
reciente constitución del "comité de notables" para analizar el estado de la
sociedad de la información fue un insulto a todos los españoles y en particular
al tejido empresarial y asociativo que la red ha venido fraguando en los últimos
años.
Un comité al que no fueron invitados a participar ni las asociaciones de
usuarios ni empresariales y que definio un marco sujeto a las aspiraciones de
los grandes jugadores del sector, olvidando a la PYME y a los propios
consumidores.
ZP... ¿Buen Rollo?
La futura llegada de ZP al frente del Gobierno esta causando un clima de
expectación dentro del sector "tecnologico". Algunas cosas cambiaran y otras
seguiran igual, entre otras cosas porque la existencia de acuerdos, contratos y
compromisos, firmados por el anterior Gobierno, deben logicamente respetarse en
tanto en cuanto así funciona un regimen democratico normal.
Sin embargo, un anuncio, presente ya en el programa electoral del PSOE esta
causando cierto temor entre el sector, la fusión del Ministerio de Educación con
el de Ciencia y Tecnología.
Desde el PSOE se defiende este nueva reestructuración como una manera de manejar
mejor los recursos en investigación y dotar de "contenido propio" al antiguo
MCYT. Entroncar la investigación con los planes de Educación, favorecerá sin
duda a las unviersidades y en la futura formación de nuestros profesionales.
Sin embargo, el peso de "Educación", un Ministerio de los grandes, puede
desorientar la tarea que aún queda pendiente y que no es poca en todo lo
concerniente en el desarrollo de la sociedad de la información en España.
Es más, en los últimos años y tras el estallido del boom de internet se ha ido
entendiendo el fenomeno de internet como un tema de investigación y no economico
o empresarial. Desde algunos sectores se reclama que deben ser las Universidades
quienes tejan el futuro tejido empresarial de este sector, a través de apoyos
decididos de la administración y de fondos de capital, olvidando que España no
es California, y que nos guste o no, el Universitario español tiene muy poca
madera de "emprendedor".
Mucho nos tememos que si el PP dejo en manos de los grandes operadores el
desarrollo de la red en España, el PSOE pudiese caer en otro extremo y creer que
deben ser los centros universitarios quienes nos coloquen a la altura de
nuestros vecinos, olvidando que sin un tejido empresarial propio España no podrá
competir en una sociedad globalizada y en el que a Occidente se le reserva el
papel de proveedora de "servicios".
España ha sido y es un país de emprendedores aunque con facetas e identidad
propia. El desarrollo del tejido empresarial que se ha venido conformando
alrededor de las Tecnologías de la información así lo demuestra. Como también se
demuestra que han sido los proyectos surgidos del empeño los que han triunfado o
han encontrado su lugar en el mundo empresarial. Los españoles han sabido crear
pequeñas PYMES enfocadas al desarrollo tecnologico, diseño, publicaciones
online, servicios móviles, contenidos para adultos, la gran mayoria de ellas sin
ningún tipo de apoyo economico ni fiscal. El "dinero" de los planes europeos y
españoles se ha malgastado enormemente en proyectos surgidos de ambitos
"institucionales" sin pies ni cabeza, pero eso si con buenas influencias para
obtenerlo.
La PYME online española espera un cambio de rumbo, no volver a ser "olvidada",
ni "menospreciada", formar parte de las misiones comerciales de exportación (no
olvidemos que debemos vender servicios y algunos desarrollos made in Spain son
100 veces mejores que otros promocionadas por consultoras y procedente de otros
países) y que se eles reconozca su papel de motor de cambio para el desarrollo
de una sociedad más moderna, más justa, más conectada.
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